Por Mito Núñez
Pensar en la conclusión de una faena del ejercicio de gobernar es un suceso marcado a partir de una pauta empalada por lo ideal y efectivo del resultado de una generación que elige con arreglo a la capacidad, la formación va erudición que trae el valor de quien es llamado. cuestión ultima, que no se ensena ni se compra.
De lo anterior podemos colegir que, para sustituir un elegido, hay que arrebatar con la lanza del ángel que es llamado por las masas. para que este sea el quia: maxime cuando. como consecuencia de los malestares sociales, la veteranía se hace tan necesaria para combatir los actuales desastres; ya que, en este universo circular. el retorno de los padecimientos nos pone a prueba a cada instante. Y es por ello por lo que las competencias probadas de un líder de experiencias lo reputan como persona con las destrezas y aptitudes indispensables para gestionar las tabulaciones que regresan.
En esta dicotomía de hacer o quedarse a esperar. elegir se hace imperioso. puesto que la inercia o la mala elección derivarían en un acontecimiento nefasto que no esperara para hacerse manifiesto a través de venganzas y desgobierno. Cuidado! La vigencia y la actualidad no las dan los años, sino la especialidad y la confianza que posee quien ya ha hecho. El desafío actual reclama como timonel solo a uno cuya eidética memoria le otorgue el acervo suficiente para gobernar eludiendo lo que. por experiencias vividas, se sabe
no nos conviene