San Salvador.- El vicepresidente de El Salvador, Félix Ulloa, expresó este lunes que los Acuerdos de Paz que dieron fin a 12 años de conflicto armado interno en el periodo de 1980-1992, «terminaron en estafa» y aseguró que no piensa que hay que «conmemorarlos» ni «honrarlos».
El Salvador conmemora este 16 de enero el aniversario 31 de la firma de los Acuerdos de Paz. El acontecimiento histórico no es reconocido por el Gobierno del presidente Nayib Bukele, por lo que no habrá actos oficiales para conmemorar dicha fecha.
El aniversario de la paz también se da en momentos en que el país centroamericano se encuentra bajo un régimen de excepción, implementado por el Gobierno de Bukele para «combatir» a las pandillas.
«La firma de los Acuerdos de Paz nos generó mucha esperanza, mucha expectativa (…) pero nos fuimos decepcionando cada año hasta llegar a la triste realidad que el pueblo dijo hay que cerrar esta etapa, olvidemos de eso, nos estafaron», señaló el vicemandatario en una entrevista en un canal local.
«Yo sí considero que los Acuerdos de Paz fueron una posibilidad que no supimos aprovechar y que al final terminó en una estafa para la expectativa de nuestro pueblo», apuntó.
La Asamblea Legislativa, de amplia mayoría oficialista, aprobó en enero de 2022 un decreto para declarar el 16 de enero como el Día Nacional de las Víctimas del Conflicto Armado. Sin embargo, tampoco se ha organizado un evento oficial para recordar a las víctimas.
«Yo no pienso ni que hay que conmemorarlos, ni que hay que ignorarlos. Simplemente hay que reflexionar sobre el significado», agregó Ulloa.
La guerra civil (1980-1992) enfrentó al Ejército salvadoreño, financiado por Estados Unidos, y a la guerrilla del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), ahora partido político de oposición.
El conflicto armado se saldó con unas 75.000 personas muertas y entre 8.000 y 10.000 desaparecidos, según diversas fuentes.