Al menos 308 niños menores de cinco años murieron por hambre en Colombia en 2022, la cifra más alta del último quinquenio, reveló la Defensoría del Pueblo este viernes.
«Es absolutamente grave que en 2022 se hayan muerto 308 niños y niñas menores de 5 años de edad por desnutrición y enfermedades asociadas», repudió el encargado de la entidad que vela por los derechos humanos, Carlos Camargo.
«Es el año con mayor número de casos en los últimos 5 años», detalló la Defensoría en un comunicado.
Además, casi 22.000 niños sufren «desnutrición aguda», la mayor parte de ellos (4.089) en Bogotá.
En enero, luego de conocer un informe oficial sobre 20 niños del pueblo indígena Wayuu que habían muerto por hambre durante su mandato, el presidente Gustavo Petro admitió un «fracaso» de su gobierno, que comenzó en agosto del año pasado.
La Guajira, una región desértica en el extremo norte del país donde se asientan los Wayuus, es precisamente el lugar más castigado, con 85 fallecimientos. Le sigue Chocó (35), un departamento selvático ubicado en la costa pacífica donde también abunda la población indígena y afro.
En 2022 la Defensoría registró «111 casos (fatales )más que en 2021», agregó la entidad.
Camargo alertó sobre «un alto subregistro de muertes por desnutrición en territorios» alejados, como la Amazonía colombiana.
A inicios de 2022, 7,3 millones de colombianos estaban en situación de inseguridad alimentaria, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Casi el 40% de los 50 millones de habitantes vive en la pobreza, castigados por el desempleo (9,1%) y una de las tasas de informalidad más altas de América Latina (58%).