La Dirección General de Epidemiología emite alerta epidemiológica por inundaciones
ante el riesgo de aumento de enfermedades en las poblaciones afectadas por las lluvias.
La finalidad es, asegurar la atención de la población afectada a nivel local y la desplazada en casas de familiares y amistades; fortalecer el sistema de vigilancia de enfermedades de notificación obligatoria (ENO) relacionada a estos eventos y establecer medidas de respuesta, control y prevención ante brotes de enfermedades.
La Dirección del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), informó que, de acuerdo
con el boletín meteorológico del 5 de noviembre, de la Oficina Nacional de Meteorología (ONAMET), el cual establece que, para este sábado, se prevén nublados desde horas matutinas acompañados de aguaceros muy fuertes localmente, tormentas eléctricas y ráfagas de viento hacia poblados de las regiones: noreste, la llanura oriental, el litoral costero caribeño, así como, la cordillera Central y la zona fronteriza.
Estas condiciones, estarán asociadas a la humedad e inestabilidad provocada por la
vaguada en todos los niveles de la troposfera y la onda tropical, las cuales, inducen una
zona de baja presión al sur de la isla sobre aguas del mar Caribe.
Se declara 21 provincias en alerta, de las cuales 12 tienen alerta amarilla (La Altagracia, Hato Mayor, El Seíbo, Semana, Monte Plata, Sánchez Ramírez, Monseñor Nouel, San Cristóbal, San Pedro de Macorís, Monte Cristi, Santo Domingo y Distrito Nacional) y 9 en alerta verde (Puerto Plata, Santiago, Valverde, Santiago Rodríguez, San Juan, La Vega, Duarte, María Trinidad Sánchez y Azua).
Debido a los daños ocasionados en las últimas horas por las lluvias ocurridas por
incidencia de una vaguada y una onda tropical, que provocaron crecidas de ríos, arroyos y cañadas, inundaciones urbanas, deslizamientos, resultandos en pérdidas de vidas humanas y grandes daños a edificaciones, vehículos y propiedades públicas y privadasen el Distrito Nacional y provincia de Santo Domingo. La Presidencia de la República emitió el decreto No. 638-22, que declara en estado de emergencia al Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo.
El Ministerio de Salud Pública, recuerda que durante la temporada de lluvias, la
exposición al agua de inundación contaminada puede ocasionar enfermedades como, infecciones de heridas, Infección en la piel y leptospirosis.
Otras como las enfermedades gastrointestinales, pueden aparecer por consumo de agua contaminada, debido a averías ocasionadas en las tuberías distribución del agua de la red durante el paso de fenómenos atmosféricos.
Las enfermedades transmitidas por picaduras de mosquitos como el dengue también se incrementan, debido a la proliferación de estos insectos por el aumento de los criaderos tanto producto del agua de lluvia limpia estancada como por la necesidad que tienen las familias de tener agua almacenada.
Otros eventos que aumentan en la temporada de lluvias y huracanes son los traumas, las
lesiones y el tétanos. A estos se suman los brotes que pueden ocurrir en los albergues
(infección respiratoria aguda, conjuntivitis, COVID-19, diarrea, etc.).
Puede presentarse un empeoramiento de enfermedades crónicas como hipertensión y
diabetes y afectación de la salud mental, sobre todo si el periodo de desplazamiento se
prolonga.
Ante esta situación, el Ministerio de Salud Pública instruye las siguientes medidas:
A la población en general:
– Evite nadar y caminar en aguas que puedan estar contaminadas.
– Evitar el contacto con agua, lodo y vegetación que probablemente esté contaminada
con orina, especialmente cuando la persona tiene erosiones o heridas. Aquellos que
ya han estado expuestas deberán acudir a las Direcciones Provinciales de Salud y
Direcciones de Área de Salud en los lugares de riesgo para darle medidas
preventivas oportunas.
– Utilice medios de protección adecuados cuando la exposición sea necesaria, (botas
plásticas, guantes).
– Evite la acumulación de basura, ropas y papeles viejos en la casa y alrededores.
– Elimine la presencia de ratas y ratones en las viviendas y en las áreas comunes o
recreativas.
– Lave los envases enlatados, jugos, refrescos y otros empaques antes de consumirlos.
– Aplique las medidas de higiene tanto laboral como en el hogar.
– Proteja el agua para beber de posibles fuentes de infección y en todos los casos
hervirla antes del consumo. Considerar agregar cinco gotas de cloro por galón para
potabilizar el agua.
– Lavado de manos después de ir al baño y antes de cada comida.
– Cocine los alimentos y lave las frutas y/o vegetales antes de comérselos.
– Tape el agua almacenada.
A las Direcciones de Provinciales de Salud y Direcciones de Área de Salud.
– Organizar equipos de respuesta rápida a fin de investigar e intervenir brotes que
podrían ocurrir en las áreas de emergencia o desastre por incremento de lluvias.
– Coordinar acciones de intervención con las alcaldías y otras instituciones del estado.
– Notificar en forma inmediata la ocurrencia todo evento relacionado al incremento de
lluvias, emergencias y desastres, siguiendo el flujo del sistema nacional de vigilancia
epidemiológica.
– Disponibilidad inmediata y despliegue de medicamentos profilácticos para
leptospirosis, cloro en sus diferentes presentaciones para potabilización del agua.
Fumigación y descacharrización a tiempo según protocolo de prevención.
Al Servicio Nacional de Salud, Servicios Regionales de Salud y Gerentes de Zonas de
Salud:
– Organizar las brigadas de atención para ser movilizadas ante la potencial ocurrencia
de eventos relacionados a las inundaciones. Considerar la disponibilidad de kits de
insumos para la atención.
– Organizar los servicios de salud en previsión a un potencial colapso o afectación de
algunos establecimientos a fin de mantener la atención de salud.
– Activar los planes de respuesta a emergencia y desastres en todos los hospitales de la
red pública.